1-1. Un golazo de Joao Félix tras salir del banquillo no basta. La falta de puntería vuelve a penalizar a los del Cholo.
Tras el nuevo batacazo de la semana tras la eliminación completa de Europa, la vuelta a la Liga se presentaba propicia para cerrar las heridas abiertas ante su enfadada afición, que en algunos casos lo manifestaron sin entrar al campo hasta el descanso. Incluso la justa expulsión de Cabrera por parar con un agarrón un contragolpe de Morata que se escapaba solo fue suficiente para que el partido fuera cómodo. Y menos se puso cuando se adelantó el español con un gol de Sergio Darder mediante un remate cruzado desde el área pequeña de Oblak. Tocaba volver a remar y como siempre, el equipo empezó a remar con intensidad demasiado tarde. Las ocasiones se presentaban una tras otra sin suerte ante un muy acertado ex-atlético Lecomte, al que por fin vimos parar y muy bien tras su temporada pasada temporada en blanco a la sombra de Oblak. Afortunadamente, una gran jugada de Joao Félix, tras saltar una vez más desde el banquillo, acabó suponiendo el empate. Faltaba tiempo para la remontada, pero a pesar de seguir teniendo oportunidades de decantar la balanza a su favor, la falta de acierto en el remate y Lecomte, impidieron la tan necesaria victoria que finalmente no llegó.
Otro tropiezo en Liga, vuelve a poner en peligro las posiciones Champions antes del próximo parón mundialista. Antes, hay que ir a Mallorca cambiar la tendencia y ratificarlo en Copa sin sorpresas ante el Almazán soriano. Esperemos que así sea y que no sea todavía peor la actual tendencia negativa.