2-2. Carrasco y Rodrigo de Paul, igualaron las dos ventajas de los alemanes. El belga no acertó con el postrero penalti decisivo en un triste final de partido para los atléticos.
Tras la victoria del Oporto en Brujas en el partido de la primera franja horaria del día, el Atleti saltaba al césped sabiendo que había que ganar o ganar los dos partidos restantes. Esta espada de Damoclés atenazó al equipo rojiblanco en el tramo inicial del encuentro donde los alemanes se adelantaron hasta dos veces en el marcador con goles de Mousa Dyabi y Hudson Odon tras sendos fallos de contundencia para sacar el balón, con el gol del empate temporal entre ambos tanto alemanes de Yannick Carrasco. Pero el empuje y el empeño atlético no tuvieron recompensa hasta el inicio de la segunda mitad con el gol del empate de Rodrigo de Paul. El Atleti, sabedor de que este empate no le valía, fue a por el partido con todo pero sin el suficiente acierto y tranquilidad para conseguir lograr la remontada.
Hasta que llegaron los cinco fatídicos minutos de descuento, donde todo aconteció como una cruel pesadilla para los del Cholo. Tras un saque desde la esquina, pitido final, que dejaba fuera al Atleti de la Champions, pero ante la sorpresa y alegría inesperada de todos, se encendía una luz de esperanza con un justo penalti rescatado por el VAR. Máxima Ilusión de volver a reengancharse en la máxima competición en las gradas. Carrasco lanza mal la pena máxima, rechazando el portero alemán Hradecky. Saúl remata de cabeza al larguero en primera instancia y después Reinildo remata de nuevo, pero se encuentra con la bota de Carrasco muy cerca de la línea gol, que hace que el balón salga por encima del larguero. Crueldad en grado superlativo para el Atleti, que no mereció este castigo de la "2ª eliminación de la Champions" en tan solo unos minutos.
Ahora no hay ya tiempo para lamentarse, y tras el paso por Cádiz en Liga, tocará pensar en la nueva "final" de Oporto del próximo martes para no caerse del todo de Europa y que el fracaso sea más estrepitoso todavía. Hoy no se mereció este castigo tan duro, pero no ratificar la clara superioridad "teórica" del equipo en los partidos anteriores en un grupo "asequible", dictó esta primera grave sentencia para la temporada del Atleti. Por eso, no queda otra que ir a "Diciembre" ante el Oporto a "recuperar" como los malos alumnos.