4-0. Los regalos en defensa del Atleti y la inoperancia en ataque le llevaron a una dura y muy merecida derrota europea.
Tras el accidentado partido del pasado domingo en el derbi, volvía la Champions con una difícil visita al estadio Da Luz, de triste recuerdo para los madrileños, acrecentado tras la clara derrota de hoy. El Benfica fue mejor en todo momento y con un gol de Akturkoglu en la primera mitad y tres en la segunda de Di Maria de penalti, Bak y Kokcu de nuevo de penalti, destrozaron a un flojísimo e impreciso Atleti en todo momento. Sin duda, el primer penalti tras el inicio de la segunda parte, tras la revisión del VAR, fue clave para la tendencia posterior del partido. Y la debacle pudo ser mayor si el Benfica hubiera acertado al final de la primera mitad en una clara ocasión de los rojos del Benfica en uno más de los múltiples fallos defensivos atléticos del partido y si no hubiese estado un gran Oblak en la portería madrileña. Y por parte rojiblanca, inoperante en ataque, solo creó una ocasión en centro chut de Samu Lino, que se acabó estrellando en el larguero. Muy poco bagaje para un equipo que debe aspirar al máximo en todas las competiciones, pero desde luego no con partidos tan nefastos como éste de Lisboa.
Tras esta durísima derrota, el sistema de competición de esta Liguilla con ocho partidos, permite que no se enciendan las alarmas tras esta primera derrota de la temporada, muy clara, pero con suficiente tiempo para reaccionar. Pero cuidado, que tras esta segunda jornada, el Atleti se coloca en el puesto 23, lejos de los ocho primeros puestos de privilegio. Pero de nada vale lamentarse, ya que el domingo vuelve la Liga y nada menos que en el Reale Arena, donde sin duda, habrá que mostrar otra cara.